Europa.- La Boda Real celebrada el pasado sábado entre el Príncipe Harry y Meghan Markle dejó muchos protagonistas en escena, como fue el caso de Louis Spencer, sobrino de la Princesa Diana, quien dejó cautivadas a millones de chicas en todo el mundo, asombradas por su gran atractivo.

Louis Spencer primo del principe Harry es oficialmente el nuevo soltero más codiciado de la familia real británica. Spencer no recibe tanta atención como sus famosos primos, por lo que hay muy poca información sobre él.

Lo único que se sabe es que su nombre completo es Louis Frederick John Spencer, Vizconde Althorp.

Es el hijo de Charles Spencer, noveno conde Spencer y también hermano de la Princesa Diana. Hasta el momento ha vivido alejado del foco mediático, pero desde el momento en el que se presentó en la boda real el 19 de mayo junto a sus hermanas: Lady Eliza Spencer y Lady Kitty Spencer y su madre Victoria Aitken, todos las miradas se han centrado en él.

Nacido el 14 de marzo de 1994, Spencer de 24 años, se encuentra el primero en la línea de para heredar el título de su padre, convirtiéndolo en el décimo conde de Spencer.

Esto significa que su futura esposa obtendrá el título de una condesa. Se estima que la fortuna familiar ronda los 196 millones de dólares.

Spencer no cumple ninguna función realimportante, por lo que no se le suele ver en actos públicos.

La última vez que fue visto antes de la boda de Meghan y Harry fue en la boda de Catalina y el Príncipe Guillermo en 2011, hace siete años.

No tiene ningún perfil abierto en redes sociales en público, por lo que habrá que esperar a algún acto familiar para poder volver a verle.

 ABC

Nueva Orleans, EE.UU.- Beyoncé invirtió parte de su fortuna en una iglesia en Nueva Orleans, al parecer la nueva tendencia inmobiliaria entre algunas de las estrellas más famosas de la música parece ser la adquisición de propiedades de instituciones religiosas.

Primero Katy Perry compró un convent.

La diva de la música compró un edificio de principios del siglo XX de casi 700 metros cuadrados de planta ubicado en el Garden District de Nueva Orleans.

Solange Knowles, la hermana de la intérprete, actualmente reside muy cerca de la zona y aunque hasta el momento se desconoce el uso que le dará la famosa, las leyes locales indican que lo podría convertir en vivienda.

Construida hace más de 100 años, la iglesia se encontraba en desuso tras el fallecimiento años atrás del pastor que regía el establecimiento.

La propiedad se encontraba a la venta a través de un conocido sitio inmobiliario de lujo y tenía un precio 850 mil dólares aunque no se ha revelado exactamente cuánto pagó la cantante quien lo adquirió mediante un fideicomiso.

Beyoncé iniciará en junio su gira mundial, On the Run II, en conjunto con Jay-Z que tendrá fechas en Europa, Estados Unidos y Canadá.

Inglaterra, Reino Unido.- El príncipe Harry de Inglaterra y la ex actriz estadounidense Meghan Markle se casaron este sábado en Windsor, en una iglesia San Jorge llena de celebridades y con miles y miles de personas esperándolos en las calles.

El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, líder espiritual de la Iglesia anglicana, tomó los votos matrimoniales a los novios, que tuvieron las manos enlazadas durante gran parte de la ceremonia.

Esta tuvo toques del mestizaje que encarna la pareja, como el sentido sermón del obispo estadounidense Michael Curry, o la versión de la canción “Stand By Me” que hizo un coro de gospel.

Tras toda la polémica suscitada por la ausencia de su padre Thomas Markle, Meghan Marle recorrió prácticamente sola todo su camino hasta el altar.

Markle llevaba un vestido blanco diseñado por la británica Clare Waight Keller para Givenchy, con velo, escote de barco y el pelo recogido con una tiara, y se tomó del brazo de su suegro, el príncipe Carlos, a muy poca distancia del altar.

Ahí la esperaba su novio, Enrique de Inglaterra, vestido con uniforme de gala militar.

Los futuros duques de Sussex esperaban ser declarados marido y mujer.

Enrique de Inglaterra llegó a pie a la iglesia cuando faltaba algo menos de media hora, acompañado de su hermano Guillermo, su padrino de boda.

La gente en las calles vitoreaba cada momento destacado del día, retransmitido en las pantallas gigantes.

Markle emprendió el camino a la iglesia en un Rolls-Royce Phantom IV, acompañada de su madre Doria Ragland.

El cantante Elton John, la presentadora de televisión Oprah Winfrey, los actores George Clooney e Idriss Elba, el exfutbolista David Beckham, o las exnovias de Enrique Chelsy Davy y Cressida Bonas, estaban en esta iglesia, tumba de reyes y escenario este sábado de su decimosexta boda real desde 1863.

Entre los hombres predominaba el chaqué oscuro, combinado con chaleco brillante y corbata, ellas con tocadas con vestidos de todos los colores, y espectaculares sombreros.

Las calles de Windsor estaba abarrotadas de gente esperando el paseo de la pareja en carroza descubierta a las 13H00 (12H00 GMT), después de la ceremonia nupcial.

La reina Isabel II de Inglaterra nombró a Enrique duque de Sussex, conde de Dumbarton y barón de Kilkeel, respectivamente, un titulo nobiliario inglés, escocés y norirlandés, como manda la tradición.

La actriz ostentará los mismos títulos en cuanto se case.

Al final del paseo, de una media hora, se cerrará el telón al público y empezará la parte privada de la boda, con un almuerzo ofrecido por Isabel II en el castillo de Windsor y una fiesta de noche en la mansión Frogmore, gentileza del padre del novio, el príncipe Carlos de Gales.

En las calles de todo el país se organizarán fiestas vecinales, al amparo de unas previsiones meteorológicas esperanzadoras, y el día acabará bien regado por la muy graciosa concesión de permitir que los pubs cierren más tarde que lo habitual.

Todo ello, rodeado de grandes medidas de seguridad, en un país que sufrió cinco atentados en 2017, con un balance de 36 muertos y decenas de heridos.

Será el príncipe Carlos quien acompañe a Meghan Markle al altar debido a la ausencia de su padre, Thomas Markle, por razones de salud y tras conocerse que se había prestado a escenificar unas fotos para unos paparazzi, un pecado capital desde que Diana de Gales murió perseguida por unos fotógrafos en París.

Tampoco estarán sus dos hermanastros, que no han ahorrado bilis contra la novia, y la única presencia notoria de su familia será la de su madre Doria Ragland, con la que pasó su última noche de soltera y con la que se desplazara en auto hasta la iglesia.

La ceremonia se ajustará a las tradiciones de la Iglesia de Inglaterra, con algún toque diferente, como el coro de gospel que cantará “Stand By Me”, y el sermón de un pastor estadounidense que promete ser más enérgico que lo habitual por estos lares.

Atrás quedaron los tiempos en que una divorciada estadounidense -Wallis Simpson, cuya boda con Eduardo VIII le obligó a abdicar en 1936 después de un breve reinado de 11 meses- podía hacer temblar los cimientos de una institución que ha presidido la vida del país desde la noche de los tiempos, con una breve interrupción en el siglo XVII.

Markle será la primera mulata de la familia real que se recuerda, acercando más que nunca el palacio de Buckingham a los barrios jamaicanos de Londres, donde el enlace ha despertado también interés.

“Está muy bien que esta persona llegue a la familia real, nos da sentido de pertenencia”, dijo a la AFP la tendera caribeña Esme Thaw en su comercio de Brixton, el popular barrio de Londres.

La boda es una gran operación de relaciones públicas para la Casa Real británica, que podía haber optado por la privacidad que sus jóvenes miembros suelen reclamar, pero que ha preferido echar mano de la pompa y circunstancia que la hacen atractiva.

Como manda el boato, la boda tendrá lugar en una lugar altamente simbólico, la iglesia de San Jorge del castillo de Windsor, un templo gótico originalmente del siglo XIII, donde está enterrado Enrique VIII, templo de la Orden caballeresca medieval de la Jarretera, que integran, entre otros, Isabel II, Felipe VI de España y el emperador japonés Akihito.

Desaparecido el Imperio, con el Brexit en el horizonte, y un gobierno británico que suscita pocas simpatías en el mundo, Isabel II y su clan están ahí para mantener la frente alta, como demuestran las miles de personas de todo el mundo, y en particular de las antiguas colonias, que viajaron hasta Windsor y cuyas banderas se mezclaban con las Union Jacks.

 

AFP

De acuerdo a la prensa británica "Beyoncé", unque todavía no está confirmado, podría cantar en la fiesta de boda del Príncipe Harry y Meghan Markle, el próximo sábado, tras la ceremonia religiosa en la capilla de San Jorge, en el Castillo de Windsor.

Beyoncé cantó en importantes eventos durante su carrera. Para Nelson Mandela, en la inauguración de Barack Obama como presidente y en otros eventos de gala.

Se dice que por eso la cantante no participó en la gala MET este año.

No sólo Beyoncé fue invitada para el matrimonio real, sino su marido Jay Z, su madre y padrastro Tina Knowles y Richard Lawson, su hermana Solange Knowles y su marido.

La Botana

En una subasta para recaudar fondos destinados a Haití, Emilia Clarke, una de las actrices más cotizadas en la a momento, reveló que el actor Brad Pitt ofreció USD 120 mil con tal de tener una cita con ella. Pero otro hombre se ganó a la estrella de Game of Thrones, que aún sigue sin poder creer que se perdió "la mejor noche de su vida".

Clarke, que se encuentra promoviendo el filme A Star Wars Story, confesó esta rara experiencia con el famoso actor durante su aparición en el show de Graham Norton.

Todo fue durante una subasta que organizó Sean Penn para recaudar fondos para Haití, donde Brad Pitt pujo con USD 120 mil dólares para ganar una velada con Clarke y así ver juntos un capítulo del exitoso programa de la cadena HBO.

Pero no todo terminó como ella esperaba. La cantidad que Pitt  estaba dispuesto a dar fue superada por un invitado misterioso, quien ofreció USD 160 mil. 

Clarke confesó quedarse "petrificada" cuando vio que Brad Pitt era uno de los que pujaba durante la subasta. "Esa fue la mejor noche de mi vida", aseguró.

"Creía que mi cabeza iba a explotar. Me puse completamente roja y no podía parar de sonreír. Fue increíble. Le escribí a todo el mundo para contárselo", añadió.

"Miré al otro lado de la habitación y él tenía su paleta levantada. Tristemente, alguien ofreció más que él y no funcionó", contó la británica, de 31 años.

El actor de Hollywood Robert De Niro siempre ha expresado su repulsión por Donald Trump,   incluso el actor expresó que no sería bienvenido en ninguno de sus restaurantes, pues preferiría retirarse y no compartir el mismo lugar.

Robert De Niro siempre ha expresado su repulsión por Donald Trump,   incluso el actor expresó que no sería bienvenido en ninguno de sus restaurantes, pues preferiría retirarse y no compartir el mismo lugar.

De Niro es socio del chef japonés Nobuyuki Matsuhisa, y tienen los restaurantes Nobu. Recientemente acaban de inaugurar uno en Marbella, a donde seguramente acudirán muchas celebridades.

Al preguntarle a De Niro cuál era el platillo favorito de Trump en la carta de Nobu, el actor dijo: “Me da igual lo que le guste a Donald Trump.

Si entra en uno de mis restaurantes me levanto y me voy”.

A veinte años de su partida, Frank sinatra, icono y estrella legendaria del swing y del jazz, reconocido actor, con más de 1.300 canciones y 50 películas, aún representa la imagen de puro talento y ambición desmesurados, una influencia artística de año tras año. 

(Francis Albert Sinatra; Hoboken, EE UU, 1915-Los Ángeles, 1998) Cantante de música ligera y actor estadounidense. La vocación musical de Sinatra nació en 1933, tras asistir a un concierto del cantante Bing Crosby.

Dos años después ingresó en el grupo llamado The Hoboken Four y se presentó al programa radiofónico Major Bowes Amateur Hours, lo que le procuró actuaciones en diversos espectáculos radiofónicos.

En 1939, el trompetista Harry James lo contrató como cantante de su orquesta, con la que realizó sus primeras grabaciones. Ese mismo año contrajo matrimonio con Nancy Barbato.

En 1940 se produjeron dos hechos fundamentales en su trayectoria personal y artística: ingresó en la orquesta de Tommy Dorsey, uno de los conjuntos de swing más populares de Estados Unidos por aquel entonces, y nació su hija Nancy.

Por su destacada personalidad, en 1942 se convirtió en un ídolo de la juventud estadounidense; en 1943 inició su carrera en solitario con la publicación del elepé All or nothing at all, del que logró vender un millón de copias. Con su popularidad en alza, en 1944 debutó en el cine con la película Higher and higher.

Ese mismo año nacería su hijo Francis Wayne, y cuatro años después, su segunda hija, Tina. A principios de la década de 1950, una grave afección en las cuerdas vocales hizo temer que el cantante tuviera que abandonar su carrera musical prematuramente; sin embargo, se recuperó sin mayores problemas.

En 1951 se divorció de Nancy para casarse con la popular actriz Ava Gardner. Dos años después, obtuvo un Oscar de Hollywood al mejor actor secundario por su interpretación en el papel de Angelo Maggio en la película De aquí a la eternidad (From here to eternity). Ese mismo año se separó de Ava Gardner.

En 1955 retomó su carrera musical con el disco In the wee small hours, que llegó a situarse en el segundo lugar de las listas de éxitos estadounidenses, mientras en el apartado cinematográfico fue propuesto para el Oscar al mejor actor por su actuación en el filme El hombre del brazo de oro (The man with the golden arm).

El disco Songs for swingin' lovers apareció en 1956, y alcanzó así mismo el número dos en las listas del país, en las que permaneció durante 66 semanas.

Al año siguiente, en 1957, obtuvo por fin el divorcio de Ava Gardner, y un año más tarde publicó el elepé Come fly to me, el primero en situarse en primer lugar de las listas, en las cuales se mantuvo durante 71 semanas, cifras que superaría con Only the lonely y sus 120 semanas de permanencia.

En la década de 1960 prolongó su brillante carrera discográfica con títulos como Nice and easy(1961) y Strangers in the night (1962).También protagonizó la película El mensajero del miedo (The manchurian candidate, 1962), que pese a ser considerada por la crítica estadounidense una de las mejores películas de Sinatra, no obtuvo un gran reconocimiento del público.

Cuando contaba cincuenta años de edad se casó con la actriz Mia Farrow, treinta años más joven que él, aunque el matrimonio naufragó pronto. En 1968 se volvería a divorciar, para contraer en 1976 su cuarto matrimonio, en esta ocasión con Barbara Marx, la viuda del actor cómico Zeppo Marx.

En el apartado musical, se prodigó en colaboraciones como Sinatra-Basie (1962), con su ídolo de juventud Bing Crosby en 1964, con su propia hija Nancy y con el compositor brasileño António Carlos Jobim en 1967 o con Duke Ellington en 1968.

En la década de 1970 se consolidó como una autentica institución de la música popular, y en 1980 interpretó su último papel dramático en la película El primer pecado mortal (The First Deadly Sin), aunque aún se le pudo ver en algún cameo como el de la comedia Los locos de Cannonball 2, del 1984.

En el año 1990, con motivo de su septuagesimoquinto cumpleaños, celebró una exitosa gira por su país y en 1994 fue galardonado con el Premio Grammy por la totalidad de su carrera artística.

 

Más de 13 millones de espectadores siguieron ayer la boda del príncipe Enrique y la estadounidense Meghan Markle a través de la BBC, la televisión pública británica.

La cadena realizó una exhaustiva cobertura del enlace desde la localidad de Windsor, donde se celebró, en la que estuvieron al frente los periodistas Kirsty Young, Huw Edwards y Dermot O’Leary.

El pico de audiencia se registró pasada la una hora local (12.00 GMT), cuando los recién casados abandonaron la capilla de San Jorge, momento que fue visto por 13,1 millones de personas.

Boda Real: Meghan Markle y Harry de Inglaterra ya son duques de Sussex

La programación especial que ofreció la BBC a lo largo de toda la jornada obtuvo 8,7 millones de espectadores de media y un 63,9% de share.

La boda del sexto en la línea de sucesión al trono británico y la exactriz estadounidense provocó una gran expectación a nivel mundial, con cerca de 5.000 periodistas y unos 80 medios internacionales acreditados para seguir el enlace desde la localidad de Windsor.

EFE

Cannes.- La mexicana Salma Hayek trae el ritmo por dentro, eso no es sorpresa para nadie, lo realmente revelador es que la mexicana haya elegido una de las galas entorno al Festival de Cannes para mostrarlo.

Como buena veracruzana, la actriz sabe bailar y muy bien, así lo demostró durante una cena realizada en la Costa Azul Francesa donde, al escuchar al colombiano Yuri Buenaventura y su banda, no dudó en subirse a bailar ¡al escenario!

Lo hay duda de que Salma Hayek trae el ritmo por dentro, eso no es sorpresa para nadie, lo realmente revelador es que la mexicana haya elegido una de las galas entorno al Festival de Cannes para mostrarlo.

Como buena veracruzana, la actriz sabe bailar y muy bien, así lo demostró durante una cena realizada en la Costa Azul Francesa donde, al escuchar al colombiano Yuri Buenaventura y su banda, no dudó en subirse a bailar ¡al escenario!

Al escuchar los primeros acordes de la banda colombiana, Salma comenzó a mover el cuerpo en su lugar, pero pronto descubrió que su sitio estaba al lado del vocalista, a quien le ayudó con los coros y haciéndola de bailarina.

A través de su cuenta de Instagram, la actriz compartió un video en el que se le ve muy divertida bailado, eso sí, ataviada en un estiloso vestido azul de Gucci.

Aunque el diseño en tono azul pastel de pronto se convertía en su “enemigo” a la hora de bailar (tenía que acomodarse los tirantes), nada impidió que Salma sacara sus mejores pasos e, incluso, se animara a cantar un fragmento de la canción que, sin duda, le hizo recordar el sabor mexicano y de toda Latinoamérica, raíces que desde siempre ha enaltecido en el extranjero.

Agencia

La ganadora del Oscar, Helen Mirren, de 72 años sufrió una tremenda caida durante su presentación en el Festival de Cine de Cannes.

La elegante presentación de Helen Mirren, en el famosísimo Festival terminó abruptamente cuando tuvo una desafortunada y estrepitosa caída.

Mirren quien llevaba puesto un colorido abrigo morado, iba de camino a una entrevista en la playa cuando dio un mal paso y terminó en el suelo.

Perdió un zapato durante su caída y fue rápidamente ayudada por otros. Al levantarse y continuar su camino, se la vio presionando su muñeca con su otra mano.

Helen Mirren le dijo a los periodistas que se torció la muñeca, pero que estaba bien.

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