Un preocupante incidente en Nigeria ha dejado a más de 300 niños secuestrados. Hombres armados irrumpieron en la escuela católica St. Mary, ubicada en el estado de Níger. La Asociación Cristiana de Nigeria (CAN) confirmó el alarmante número, actualizando reportes iniciales y generando consternación a nivel nacional.
Un total de 303 escolares y una docena de profesores fueron raptados por individuos armados durante el ataque a la escuela católica St. Mary, en el estado de Níger, en la región centro-norte de Nigeria, comunicó este sábado la Asociación Cristiana de Nigeria (CAN). La organización actualizó así la cifra inicial de 215 estudiantes sustraídos.
La cifra definitiva se estableció “tras llevar a cabo un proceso de verificación y un censo final”, declaró en un comunicado el reverendo Bulus Dauwa Yohanna, presidente estatal de la CAN, quien visitó la institución el viernes. Añadió que otros 88 estudiantes “también fueron capturados tras intentar huir” durante el asalto.
Las víctimas son chicos y chicas de entre 10 y 18 años. El secuestro tuvo lugar en la apartada comunidad de Papiri, cuatro días después de que 25 estudiantes fueran capturados en un ataque similar en la localidad de Maga, en el estado vecino de Kebbi, a unos 170 kilómetros de distancia.
Ningún grupo ha asumido la responsabilidad de los secuestros. Las autoridades aseguraron que equipos tácticos, junto con cazadores locales, fueron movilizados para buscar y rescatar a los menores.
Yohanna rechazó como inexacta la afirmación del gobierno estatal de que la escuela había retomado las clases pese a la directiva previa que ordenaba el cierre temporal de centros educativos en esa zona debido a amenazas de seguridad. “No recibimos ninguna comunicación oficial. Debe ser una idea de última hora y una forma de eludir la responsabilidad”, afirmó. También solicitó a las familias “mantener la calma y orar”.
Los secuestros en escuelas se han transformado en un símbolo de la profunda inseguridad que afecta a Nigeria, donde las bandas armadas ven estos establecimientos como objetivos “estratégicos” para atraer la atención pública. Según UNICEF, solo el 37% de las escuelas en los diez estados más afectados por la violencia cuentan con sistemas de alerta temprana para detectar amenazas.
Estos ataques coinciden con recientes declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre supuestos asesinatos dirigidos contra cristianos en Nigeria, aunque las autoridades y organizaciones locales señalan que la violencia afecta tanto a cristianos como a musulmanes. El centro atacado a principios de semana en Kebbi estaba en una localidad de mayoría musulmana.
