Mireya Féliz Cuchel narró el incidente en el Hospital Marcelino Vélez donde su hija fue víctima de un robo. Mientras la madre se ausentaba brevemente para comprar comida, un individuo aprovechó para sustraer el teléfono de la joven. El ladrón, haciéndose pasar por paciente, fue capturado tras cambiar su vestimenta en el baño del hospital.
La mujer que fue víctima de un atracador en el hospital Marcelino Vélez relató lo sucedido. Explicó que había ido a comprar comida para su hija, quien se encuentra internada en ese centro de salud. En ese instante, observó a un desconocido cerca de la puerta de la habitación. Regresó sobre sus pasos y advirtió a su hija que estuviera atenta. Luego volvió a salir, momento que el individuo aprovechó para cometer el delito.
“En el breve instante en que me retiré, él aprovechó la situación. Mi hija estaba de pie con el teléfono en la mano, y él le dijo ‘déjame ver’, arrebatándole el dispositivo de inmediato”, continuó Mireya Féliz Cuchel.
Después del robo, la hija intentó dar la alarma, pero el asaltante se encerró en el baño y se cambió de ropa: se quitó un polo y una gorra rojos y se puso otras prendas. El sujeto, aún sin identificar, ha sido detenido.
Otra información: El atracador simuló ser un paciente y robó un celular en el hospital.
La hija de Mireya, de 24 años, fue mordida por dos perros pitbull. Padece un trastorno mental y, al no querer permanecer con su padre, se dirigió a la casa de su madre, en Don Juan de Yamasá.
Sin embargo, regresó y, sin recursos económicos, comenzó a pedir limosna en la calle para costear el pasaje de vuelta a la casa de su madre. En esa circunstancia, un hombre la engañó y drogó, intentando abusar de ella. La joven saltó por un muro para escapar, cayendo en las garras de los perros. Será sometida a una operación.