Residentes de Cotuí, encabezados por el Bloque de la Unidad y Desarrollo Cotuisano y apoyados por el FALPO, realizaron una marcha este sábado para protestar contra la minera Barrick Pueblo Viejo y el gobierno. Los manifestantes denuncian incumplimiento gubernamental en derechos básicos, contaminación ambiental y un proceso de reasentamiento deficiente por parte de la minera. La expansión de Barrick, incluyendo una nueva planta de colas, es el foco principal de la controversia.
Residentes de Cotuí, Sánchez Ramírez, realizaron una protesta el sábado para expresar su descontento con las actividades de la minera Barrick Pueblo Viejo y las políticas del gobierno.
La manifestación, organizada por el Bloque de la Unidad y Desarrollo Cotuisano, contó con el apoyo del Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO) y otras organizaciones sociales de la región Nordeste. Los participantes llevaron pancartas y entonaron consignas que acusaban a la empresa minera de una expansión sin considerar las consecuencias para la población dominicana.
Los líderes comunitarios denunciaron el incumplimiento gubernamental en la provisión de servicios básicos como agua potable, reparación de caminos rurales y condiciones de vida dignas. Afirmaron que las comunidades campesinas cercanas a la mina son las más perjudicadas, sufriendo escasez de agua, contaminación ambiental y represión.
En los últimos meses, Barrick Pueblo Viejo ha generado polémica por su plan de construir una nueva planta de colas en la provincia, para almacenar residuos mineros. Este proyecto, parte de su estrategia de expansión para prolongar la vida útil de la mina, ha enfrentado la oposición de grupos sociales, comunitarios y ambientalistas, quienes advierten sobre posibles riesgos de contaminación y desplazamiento de familias.
Como parte de este plan, la minera ha comenzado un programa de reasentamiento para las comunidades afectadas. Sin embargo, líderes comunitarios y organizaciones de derechos humanos aseguran que el proceso carece de un diálogo genuino, con compensaciones consideradas insuficientes y sin garantías de condiciones adecuadas para los reubicados.
El portavoz de la movilización, Tereso Arias, reiteró el rechazo a la operación minera y a su expansión. "No nos vamos a quedar callados, no queremos que se vayan… lo exigimos", declaró mientras participaba en la marcha junto a otros líderes y ciudadanos.