El presidente Donald Trump ha dado luz verde a Ucrania para llevar a cabo ataques de largo alcance en territorio ruso, según declaraciones de su enviado especial para Ucrania, Keith Kellogg. Esta autorización, supervisada por el Pentágono, representa un cambio significativo en la postura previa de Trump. La decisión se toma en un contexto de crecientes tensiones y ataques mutuos entre Ucrania y Rusia.